Hoy viernes 30 de mayo a las 20:30 horas, la Hacienda Santa Cruz de La Rinconada acoge la muestra final de Vertebración, un proyecto que, en su decimoquinta edición, reafirma su apuesta por la creación en vivo a través del cruce entre danza contemporánea e improvisación musical. Organizado por la Asociación Andaluza de Compañías y Profesionales de la Danza (PAD) en colaboración con la Asociación Sevillana de Jazz (Assejazz), el encuentro propone una experiencia donde la improvisación es una herramienta de expresión crítica y un modo de relación.
Este año, el proyecto se traslada del Teatro de la Maestranza —su sede habitual— a la Hacienda Santa Cruz, un espacio significativo situado en La Rinconada – Sevilla, municipio que ha consolidado en los últimos años su compromiso con las artes escénicas contemporáneas. Este cambio de escenario no es solo logístico, sino también simbólico: sitúa la creación fuera del centro urbano, desplazando la mirada hacia nuevos territorios y públicos.
Durante cinco días, cuatro bailarinas y tres músicos han convivido y trabajado bajo la dirección artística de Ana Buitrago —coreógrafa y bailarina de referencia en el ámbito de la improvisación escénica en España— para construir una pieza efímera, abierta, permeable al entorno y a las condiciones de cada encuentro. En este laboratorio vivo, la práctica artística se entiende como proceso, no como producto final cerrado. La iluminación de Carlos López Camps y el acompañamiento coreográfico de Natalia Jiménez, Marco Vargas, Roberto Martínez y Félix Arjona completan un dispositivo escénico que busca desdibujar jerarquías y potenciar la escucha mutua entre disciplinas.
Uno de los aspectos más interesantes de este proyecto es que todos los intérpretes de danza y música elegidos para la ocasión tienen una trayectoria independiente y son creadores de sus propios proyectos. Cada uno tiene un lenguaje propio. Con Vertebración se posibilita el diálogo conjunto, y quien va a aunar o a guiar a los artistas elegidos a través de la práctica de la improvisación como directora artística es Ana Buitrago, coreógrafa y bailarina independiente, también colaboradora en muchas ediciones de libros sobre danza y pensamiento, y que ha pertenecido al movimiento de la danza experimental en España. Desde la PAD la invitamos a nuestra última edición del programa de formación MEDANZOTOA y nos parecía una oportunidad volverla a llamar para resaltar su labor y su trayectoria
Natalia Jiménez
El elenco reúne a intérpretes de sólida trayectoria en la investigación del movimiento y la música experimental: las bailarinas Zaida Ballesteros, Anna Katalin Nemeth, Raquel Madrid y Helena Marant; y los músicos Mattia Marani, Calebe Simoes y Rocío Guzmán. Juntos dan cuerpo y voz a una propuesta que se construye en tiempo real, sin partituras ni coreografías predefinidas, en un constante ejercicio de negociación con el presente.
Más allá del resultado escénico, Vertebración se consolida como un espacio de resistencia frente a los modelos de producción acelerados y estandarizados. Aquí, la improvisación no se reduce a una estética, sino que se convierte en una ética: un modo de estar, de responder y de habitar lo colectivo. El apoyo del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) ha sido clave para sostener esta iniciativa, que insiste en defender lo frágil, lo inestable y lo emergente como formas legítimas de creación.
Lo más probable es que todos los que vamos a realizar la asistencia coreográfica durante los días previos a la muestra terminemos participando en la improvisación convirtiendo el evento en una gran fiesta porque siempre es apasionante ver la combinación de todos los artistas en escena, la espontaneidad y complicidad con la que se trabaja en este tipo de formato con el público.
Invitamos a que acudan tanto espectadores de La Rinconada como de fuera.
Natalia Jiménez
En tiempos en que lo espectacular tiende a imponerse sobre lo procesual, Vertebración nos recuerda que la danza contemporánea sigue siendo un terreno fértil para la experimentación y el pensamiento crítico desde el cuerpo. Una apuesta necesaria y lúcida que sigue encontrando en el sur un lugar donde seguir latiendo.