Anne Teresa De Keersmaeker junto a su Compañía Rosas son referentes mundiales de la danza contemporánea, y en esta ocasión estrenan en España EXIT ABOVE after the tempest. Una obra para trece intérpretes donde Anne Teresa De Keersmaeker comparte la creación con Meskerem Mees y Carlos Garbin, siendo Jean-Marie Aerts quien se encarga de la parte musical.
EXIT ABOVE after the tempest juega con la tensión que existe entre la marcha colectiva (marching together) y el pas de côté (stepping out), entre el vagar -el wandern”solitario y romántico- y el potencial político de un grupo de personas no armadas que caminan juntas, entre lo individual y lo colectivo, entre la línea y el círculo. El caminar está en las antípodas de la hegemonía de la funcionalidad y de la eficacia. Es un tipo de esfuerzo que no produce nada, salvo pasar el tiempo y atravesar el espacio. Este favorece sobre todo la aparición de pensamientos y de sueños que nos muestran hasta qué punto nuestro mundo interior es un paisaje en sí mismo; un paisaje que, a menudo, solo se puede atravesar a pie.
EXIT ABOVE after the tempest retrocede en el tiempo hasta llegar a las raíces de la danza, hasta las raíces del pop occidental. Desde las primeras coreografías, Anne Teresa de Keersmaeker se impuso como uno de los principios rectores: el caminar, forma primaria del movimiento, algo que nos es tan familiar que raramente le prestamos atención. También musicalmente el espectáculo es una vuelta a las fuentes, más concretamente a un cruce: a las raíces del pop y del blues, con sus misteriosas notas de blues, sus zonas oscuras y ambiguas, situadas en alguna parte entre las gamas menor y mayor, entre la tristeza y la alegría.
