Daddy Long Legs estará de gira por España del 29 de agosto al 7 de septiembre llenando el escenario con el mejor blues rock y garage. Una magnífica oportunidad para disfrutar de su último álbum Street Sermons y todos sus grandes éxitos.

 

Desgranamos algunas joyas en la discografía de Daddy Long Legs, una selección de canciones donde aúnan blues, rock y garage lleno de energía y autenticidad.

 

 

Street Sermon es una declaración de intenciones, con una introducción potente y un ritmo implacable, esta pista captura la esencia del álbum. Las letras, cargadas de mensajes sociales y personales, se combinan con la música en una mezcla perfecta que define el sonido de la banda.

 

 

Nightmare es una de las canciones más intensas del álbum con una melodía oscura y una atmósfera inquietante que destaca por su capacidad para envolvernos en una sensación de intriga y misterio. La interpretación vocal de Brian Hurd es imponente, añadiendo una capa extra de emoción a la canción.

 

 

Celaphine muestra su lado más melódico donde se combina un ritmo contagioso con letras amorosas, probablemente relacionadas con la narrativa tradicional, y con una maravillosa profundidad emocional.

Celaphine, atormentas mis sueños
En la noche, eres todo lo que veo
Con tus ojos, tan oscuros y profundos
Toma mi mano, hacia el sueño

 

 

Back Door Fool es un ejemplo perfecto del estilo inconfundible de Daddy Long Legs: blues, rock riffs de guitarra, armónica y el vozarrón de Brian Hurd se entrelazan de manera magistral

 

 

 

Siente el poder de I feel so electric con este ritmo, la energía atravesando tu cuerpo de arriba abajo en un chute inmenso de adrenalina. Todo un ejemplo donde demuestran su habilidad para crear canciones emocionantes y técnicamente impresionantes.

 

 

 

Rockin’ My Boogie, ¡¡oh yeah!!  un boogie-woogie blusero que rebosa vitalidad por los cuatro costados, una de las canciones más optimistas y vibrantes que muestran el lado festivo de Daddy Long Legs.

 

 

Y como no podía ser de otra manera, nos marchamos con I’ll Be Gone un himno de liberación y fuerza personal que simboliza el deseo de libertad y el rechazo a estar atado a un lugar o una circunstancia … para seguir siempre hacia delante.

 

Cuando llegue el amanecer, me habré ido
Partiré con el viento, como un canto rodado
No sirve de nada llorar, he estado aquí demasiado tiempo
Cuando amanezca, me habré ido