Por Lois Vázquez
El festival PortAmérica, que se ha celebrado durante los días 18, 19 y 20 de Julio en el polígono de Porto do Molle en Nigrán, conforma uno de los pocos “oasis” que quedan en este desierto festivalero que está devorando, cada verano un poco más, la cultura musical que queda en la zona sur de Galicia.
Un festival que se ha tenido lugar por primera vez este año y que partió de una iniciativa casi exclusivamente privada, con la intención de acercar las dos orillas del océano Atlántico combinando artistas del más alto nivel de ambos lados del charco. Una propuesta que pretendía trascender lo musical proponiendo proyecciones audiovisuales y degustaciones gastronómicas y que comenzó el jueves 18 con actuaciones tan destacadas como la de Iván Ferreiro y Xoel López que dieron el pistoletazo de salida de la mano de propuestas tan atrevidas como las de Orquesta Metamovida o Srasrsra, grupo punk de A Coruña, representantes del Galician Bizarre.
Para el viernes 19 se guardaron dos de los platos más fuertes del festival, con la actuación de Julieta Venegas y Love of lesbian consiguieron saciar el apetito musical de los mas de 3000 asistentes. Aunque la asistencia no hubiera sido masiva, el ambiente fue muy agradable y permitió disfrutar de la música a todos los presentes. A estos dos grupos les acompañó Peter Hook Dj Set, Kitty Daisy & Lewis, Eladio y Los Seres Queridos con la orquesta de saxos de Redondela, Disco las Palmeras!, Martynez y Buffetlibre Djs que cerraron la noche con una sesión para los más noctámbulos.
Sin duda, fue el sábado el día de mayor afluencia del festival, muy probablemente atraídos por la presencia de los madrileños Vetusta Morla, especialmente queridos en estas tierras y que posiblemente ofrecieron uno de los conciertos más potentes de todo el festival. Llenos de energía y muy directos con sus canciones y sus proclamas, dieron una auténtica lección musical a los asistentes. Fue precisamente Pucho, el vocalista, quien quiso destacar y poner en valor la importancia de este tipo de iniciativas que nacen con la intención de no dejar desaparecer la cultura musical y festivalera que tanto aporta en estos tiempos tan complejos que vivimos. Además el sábado fue posible disfrutar también del “Country surf” de Corizonas, una de los grupos más originales y divertidos de todo el cartel. Del otro lado del océano llegaron Zoé que, con más de 15 años de experiencia, son uno de los grupos mexicanos referentes de la música indie-rock y para cerrar, nada menos que Fuel Fandango y los Djs de la Fábrica de Chocolate en Vigo.
En general el Festival PortAmérica, a pesar de no haber conseguido atraer en su primera edición a toda la masa de festivaleros gallegos, sin duda es un interesante punto de partida del resurgir de proyectos musicales que incentiven la promoción de la buena música combinada con otras disciplinas y salteada del buen ambiente y el calor de la época. Esperemos que este “oasis” permanezca por mucho tiempo en el panorama.
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