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El próximo 3 de noviembre se representará en el Espacio Aldáira (Alcalá de Guadaira, provincia de Sevilla), Las Desqueridas, de la mano de La Decadensia. Obra que precederá a un foro psicodramático en colaboración con Myriam Osuna.

 

La Decadensia es una compañía de teatro contemporáneo y movimiento. Dos artistas escénicas deciden fundir sus visiones después de años de similar recorrido. El teatro, la danza, el humor y la improvisación están presentes en sus piezas. Es una máquina en perpetua investigación cuyo engranaje han activado Carlota Berzal y María Cazenave con la siguiente mochila común: Grado de Interpretación en la ESAD de Sevilla, años de formación en danza contemporánea en el conservatorio de la misma ciudad, Módulo internacional de teatro físico en la Universidad Metropolia de Helsinki, Finlandia, y el programa de “Formación Internacional de Enfoques Contemporáneos para la Creación Escénica” en Concepción, Chile. La Decadensia ha creado tres piezas de danzateatro y humor: Chilinkila Virgen Random Bacán. Juntas, pero cuando aún no eran decadentes, han estrenado piezas escénicas como Tránsita (danzateatro-Chile), Merry X-MASKS (teatro de máscaras- Helsinki), Lapso Extraños (danza contemporánea- Sevilla), Monstruo (danzateatro- Sevilla) o recientemente el viaje performático de Las Intrusas (Sevilla).

 

Myriam Osuna es psicóloga sicodramatista y actriz. Compagina sus dos pasiones que son el teatro y la salud mental. Trabaja en Alcalá de Guadaira en la consulta privada y además colabora con distintas asociaciones del municipio realizando diferentes grupos de terapia. Lleva varios proyectos educativos en otros municipios sobre violencias, diversidad sexual y género con teatro del oprimido y sicodrama. Por el lado artístico, dirige varios festivales de microteatro en Valencina de la Concepción y Guillena, es profesora de teatro en diferentes municipios y miembro de las compañías teatrales “Teatrapadas” y “Sebarita Teatro”. Su labor profesional artística está muy conectada con el activismo en general y las problemáticas sociales, visibilizando sobre todo el apoyo a la salud mental.

 

 

Nos encontramos ante un evento muy especial que está integrado dentro de la gira de otoño de esta compañía andaluza, en varias localidades de la provincia de Sevilla. El cual nos recuerda que las piezas de artes escénicas se pueden representar en lugares y contextos, que vayan más allá de los teatros o de los llamados espacios no convencionales. Siendo que dichas disciplinas son lo suficientemente versátiles, para que entorno a ellas, se configuren actividades que sitúen a los espectadores en un rol activo, en donde éstos interactúen con los contenidos que se han planteado de forma inmediata.

Lo anterior, encaja con la línea trabajo del “recién estrenado Espacio Aldáira. Un espacio multidisciplinar en donde se desarrollan actividades relacionadas con la salud tanto mental como física. Su directora es la psicóloga sicodramatista María José Luna, la cual está intentado crear en Alcalá de Guadaíra un lugar de cuidados y reflexión. En el espacio se realizan actividades tanto formativas como terapéuticas, entre ellas Sicodrama, Yoga, Terapia Corporal Integrativa y talleres de autoestima, desarrollo personal y crecimiento activo.

El evento Microteatro y Foro Sicodramático intenta integrar lo que el Espacio Aldáira pretende conseguir. La idea fundamental es realizar una pieza de microteatro que contenga un dilema social y relacionado con la salud mental ya sea desde la parte más social o la más interna. Después de la representación se realizará un foro debate sicodramático dirigido por Myriam Osuna donde no sólo se utilizará la palabra, sino también el cuerpo como forma de expresión”.

Sin más que añadir, les doy paso a la sinopsis de Las Desqueridas:

 

Una sala destruida, dos cuerpos derribados; la foto de una batalla y sus consecuencias. El público asiste a una “reconstrucción de los hechos” para entender qué ha llevado a estas dos mujeres a tal desenlace. Al menos eso era lo que estas intérpretes pensaban. Rompiendo la cuarta pared, y a modo de collage (coreografías canis, canciones líricas y rap, acrobacias eufóricas, etc.) Carlota y María presentan el retrato de sus rupturas y nos preguntan cómo elaborar la obra. En este encuentro no dejan de reír sus penas y celebrar la decadencia.

 

 

 

 

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