Naciones Unidas elige el 11 de febrero como Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Asamblea Científica, y este año en su sexta edición lleva el lema Más Allá de las Fronteras: Igualdad en la Ciencia para la Sociedad, con un enfoque especial en el valor de los aspectos sociales y las dimensiones culturales en la ciencia, la tecnología y la innovación para mejorar los programas de desarrollo sostenible.
En el estudio realizado por la UNESCO entre 2014 y 2016, solo un 30 por ciento de todas las estudiantes escogen estudios superiores dentro del campo de las ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM). En el todo el mundo, la matrícula de estudiantes femeninas es particularmente baja en el campo de la tecnología de la información y las comunicaciones (TIC), con un tres por ciento; ciencias naturales, matemáticas y estadísticas, con un cinco por ciento, y en ingeniería, manufactura y construcción, con un ocho por ciento.
Los prejuicios y los estereotipos de género que se arrastran desde hace mucho tiempo continúan manteniendo a las niñas y mujeres alejadas de los sectores relacionados con la ciencia. El mundo dibujado en la pantalla no dista mucho del mundo real. Un estudio realizado en 2015 por el Instituto Geena Davis titulado Gender Bias Without Borders (Prejuicios de género sin fronteras) muestra que la representación en las grandes pantallas de mujeres que trabajan en el campo de las ciencias se limita solo a un doce por ciento.
En el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, cambiemos la narrativa predominante. Celebra con nosotras y nosotros a las mujeres y niñas que lideran la innovación y que exigen que se actúe para derrumbar las barreras con las que todavía se encuentran.
La UNESCO y ONU-Mujeres, junto con todos nuestros asociados, tienen la voluntad de dar prioridad a la igualdad de género en todos los aspectos de nuestra labor, entre otras cosas, promoviendo la educación básica en CTIM y reconociendo y apoyando la labor de las científicas de todo el mundo a través de iniciativas como el programa L’ORÉAL-UNESCO “La Mujer y la Ciencia” y la Organización de Mujeres Científicas del Mundo en Desarrollo, y haciendo que las empresas del sector CTIM asuman firmes compromisos en materia de igualdad de género mediante los Principios para el Empoderamiento de las Mujeres. La UNESCO, en consonancia con sus dos prioridades globales, “África” e “Igualdad de género”, actúa con especial dinamismo en el continente africano, ayudando a las niñas con programas de tutoría en línea, por ejemplo, en Kenya, y proporcionando material de microciencia a laboratorios escolares en la República Democrática del Congo. Este año también estamos aprovechando la oportunidad excepcional que ofrece el Foro Generación Igualdad, organizado por ONU-Mujeres y copresidido por Francia y México, en colaboración con la sociedad civil y los jóvenes, y su coalición de acción sobre la tecnología y la innovación al servicio de la igualdad de género, a fin de impulsar acciones transformadoras con miras a una evolución digital que tenga en cuenta la diversidad de género.
Las mujeres científicas son una fuente de inspiración para las jóvenes de todo el mundo deseosas de estudiar disciplinas científicas. Hoy, al celebrar el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia, es nuestro deber allanarles el camino para construir un futuro más justo y equitativo. Jennifer Doudna, galardonada con el Premio Nobel de Química 2020, declaró lo siguiente: “me encanta el proceso de descubrimiento”. Para todas las niñas que se plantean cursar una carrera científica, debería ser así de sencillo.
Extracto del Mensaje conjunto de la Sra. Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO, y la Sra. Phumzile Mlambo-Ngcuka, Directora Ejecutiva de ONU-Mujeres, con motivo del Día Internacional de las Mujeres y las Niñas en la Ciencia