El sector de la pequeña y mediana empresa editorial italiana se da cita de nuevo en Roma, esta vez del 5 al 9 de Diciembre, en la Feria Más libros, Más libres, un nombre que, seguro estaréis de acuerdo conmigo, es muy sugestivo, positivo e incitante.
Este año bajo la feria se presenta a sí misma bajo lema por un nuevo humanismo, entendido según el ente organizador como un sentido profundo de solidaridad entre las personas, argumentando que nunca como hoy el mundo está marcado por conflictos, desigualdades económicas y sociales, inestabilidad política y empujones de movimientos migratorios y que, por eso mismo, eligen poner en el centro el ser humano, sus derechos y su dignidad haciendo eco de la Declaración Universal de los Derechos Humanos del Hombre y mencionando literalmente que es el fundamento de la libertad, de la justicia y de la paz en el mundo.
Seguramente el tema elegido es peliagudo y de rabiosa actualidad sociopolítica en un país que está llevando a cabo políticas migratorias de una dureza extrema, con un controvertido gobierno de coalición que acaba de declarar que no irá a la Conferencia mundial de la migración de tendrá lugar en Marruecos y que, por ahora, no firmará el Pacto Mundial para la Migración; mientras que aprueba nuevas leyes en materia de inmigración para endurecer, entre otras muchas cosas las condiciones del asilo político.
Con esta posición abiertamente contraria a la política de Salvini abre sus puertas la Feria del Mercado Editorial italiano en Roma. Igualmente se ven muchas ganas progresar en la labor de internacionalización de sus productos editoriales y poder crecer y aumentar su competitividad en un mercado que, a pesar de haber sufrido pérdidas cercanas a los 240 millones de euros durante los años de la crisis, ha conseguido mejorar tímidamente en los últimos años.
En cualquier caso durante estos días se puede disfrutar de una feria abierta al público, con un rico programa diferenciado en tres ramas: cultural, profesional e infantil y juvenil, el cual garantiza cubrir los diferentes intereses de los participantes al evento, especialmente el tercero: aquel dedicado al público infantil y juvenil con un programa rico y extenso que ofrece a niños y chavales experiencias lúdicas que les acercan al mundo de la literatura.
De hecho, la feria está teniendo buena acogida entre el público generalista y en particular entre el público infantil e juvenil que se deja ver por los pasillos de la feria. Son muchas las escuelas que apuestan por llevar a sus estudiantes a este evento y es estupendo ver niños de todas las edades que saltan con ojos brillantes de stand en stand interesados por las historias que se esconden detrás de las tapas de los más variados libros.
Una feria con mucho potencial, enmarcada en un espacio expositivo que, para bien o para mal, no te puede dejar indiferente: La nube de Massimiliano Fuksas.
Esperamos poder ver cómo este evento sigue desarrollándose y creciendo, ayudando a un sector que, al menos desde su actitud en la feria, busca y espera en una sociedad más solidaria, más consciente y sobre todo, más humana.