Ocho apellidos Beatles no es sólo un concierto, es un espectáculo: dos bandas unidas por los Beatles y separadas por un repertorio que protagonizan una lucha encarnizadamente divertida, dinámica y nostálgica por llevarse al público a su etapa Beatles y reivindicarla como la mejor.
Tincho Remírez, miembro fundador de A Beatle Bit, destacó en la promoción del evento en Cadena Ser Pamplona y durante la presentación en la Sala Canalla que la idea de reunirse con sus “hermanos bitélmanos” en Pamplona surgió en el BeatleFeast. Este evento internacional, celebrado en Sevilla a finales de octubre de 2023, fue el punto de encuentro donde los integrantes de ambas bandas forjaron una amistad y se plantearon la posibilidad de colaborar en un proyecto conjunto en un futuro cercano.
El resultado es este Ocho apellidos Beatles, un formato de lucha de bandas innovador en el que cada una de ellas, en turnos de 15 minutos, sube al escenario a tocar el repertorio seleccionado: de un lado, The Pennytents se encargan de la primera etapa, esa que abarca desde el «Please Please Me» (1963) hasta el «Help!» (1965); del otro A Beatle Bit hacen lo propio con el periodo que discurre entre el «Rubber Soul» (1965) hasta el «Let It Be» (1970). Con esta majestuosa premisa, nada puede salir mal.
Y no es que nada saliera mal, si no que todo salió tremendamente bien. En una estupenda Sala Canalla repleta por más de 200 beatlemanos sonaron alto y fuerte decenas y decenas de himnos «beatleianos» imprescindibles a un ritmo que no dejaba lugar al aburrimiento (casi ni a poder pedir una Alhambra Especial en la barra). Mientras The Pennytents hacían las delicias de los más puristas con temas como I Want To Hold Your Hand, She Loves You, Help o A Hard Day´s Night, A Beatle Bit, apoyados en la maestría de su teclista, hacían suyos temas de la parte más compleja del repertorio como Eleanor Rigby, Magical Mystery Tour, Because o Lady Madonna. La sensación que impregnaba la sala era la de, por sonido, por repertorio y por actitud, estar muy muy cerca de haber visto un concierto de la mítica banda.
El broche de oro llegó con la esperada tregua final: ambas bandas unieron fuerzas para interpretar dos clásicos (como no, cada uno de una etapa): Get Back y Twist and Shout. Un desenlace épico que dejó al público completamente entregado. Y os preguntaréis, ¿Quién ganó la batalla?. Pues sí, es lo que estáis pensando, la contienda acabó en un empate técnico que, irremediablemente, requerirá de un desempate en las próximas fechas, porque cuando se trata de los Beatles, no hay debate que pueda cerrarse con una sola noche.