De todas las playas de España donde se permiten mascotas, la de El Espigón (Huelva) está situada en el interior de la reserva natural de las marismas del Odiel que fueron declaradas Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1983.
A ella se accede en paralelo a la ría del mismo nombre mientras se va cruzando el puerto de la ciudad, desde la carretera que llega a Mazagón o desde el sentido inverso al venir de Punta Umbría, bañada también por el río Odiel, que junto al río Tinto forman un estuario único en la Península Ibérica.
Para visitantes amantes de las aves pueden observarse todas las especies protegidas que habitan en este paraje formado por sus tres islas: Enmedio, Saltés y Bacuta. Un espacio natural que puede completarse con la visita al Parque Nacional de Doñana a muy pocos kilómetros. También es cierto que con tanto paraje natural las distancias en coche se alargan con la sensación incluso de aislamiento respecto a otros lugares ubicados en los alrededores.
Se alcanza la playa de El Espigón después de cruzar todas las marismas por la carretera flanqueada por ambos lados con agua dulce, mezclada con la que procede del Atlántico. Finalmente se entra en demarcación portuaria (a través del dique que lleva de nombre Juan Carlos I) y al final del camino se accede a la playa, con vistas a Mazagón por el este y a Huelva por el oeste.
A mitad del recorrido se atraviesa la isla de Saltés, lugar de interés histórico por sus restos arqueológicos, pero también importante por su historia más reciente ya que fue lugar de reclutamiento de presos republicanos de la guerra civil, la mayoría catalanes, quienes tuvieron que soportar toda clase de atrocidades mientras vivieron en la isla. Al igual que ellos, Miguel Hernández fue conducido a Rosal de la Frontera, también en Huelva, después de su detención en la cercana frontera de Portugal, y quince mujeres llamadas las Quince rosas de Puebla de Guzmán fueron asesinadas en esta localidad onubense.
Un lugar repleto de patrimonio histórico y natural para ir con mascotas sin ningún impedimento a la tranquila playa de El Espigón. Actualmente no hay una regulación expresa sobre la visita de animales a nuestras costas, aunque son los propios ayuntamientos quienes deciden sobre su merecido disfrute de aguas saladas y oceánicas. Este año en España se han contabilizado ya unas cien playas como esta y cada vez se van acondicionando nuevas. Las multas en playas con prohibición de mascotas pueden ascender a 3.000 euros en medio de rencillas (legales o alegales) de carácter municipal ante las lagunas normativas estatales.