¿Quién es quién en Territorios? … avanzamos algunas bandas y artistas que forman el cartel: ÁNGEL STANICH, BOMBINO, CORIZONAS, CRYSTAL CASTLES, PÁJARO, RACHID TAHA, RAIMUNDO AMADOR, RAT BOY, SEX MUSEUM, THE HORRORS, THE WOMBATS, TINDERSTICKS … y muchos más.
ÁNGEL STANICH / ESPAÑA
Ángel Stanich es un músico al margen. También es uno de los compositores más singulares que ha dado este país en los últimos años. No se parece a nadie de su generación y es dueño de una de esas voces tan únicas que provocan reacciones encontradas. Esta particular idiosincrasia lo ha convertido en muy poco tiempo en ese tipo raro del que todo el “mundillo” habla. Porque Ángel Stanich es un freak recluso centrado en la bohemia y en sus magníficas canciones. Y encima no va de nada, al contrario. Al margen de los medios, sin apenas hacer promoción de su trabajo o de sus múltiples conciertos, se ha ido convirtiendo poco a poco en un artista poco convencional. Nada de entrevistas. Tampoco lo veremos por ahí en los saraos nocturnos. Pero su música y su figura inspiran esa extraña atracción fatal del tipo borde y vulnerable. Vamos, que Stanich podría ser sin duda el sueño húmedo de protección materna infalible, no solo de cara al sexo femenino.
Con tan solo un álbum (‘Camino Ácido’), un EP (‘Cuatro Truenos Cayeron’) y un single digital que publicó a modo sorpresa navideña un tanto ácida (‘Jesús Levitante’), el ermitaño del pop ha conseguido abarrotar todo tipo de salas y festivales provocando auténticos karaokes con ‘Carbura’, ‘Mezcalito’ o ‘Metralleta Joe’, genuinos hits del rock alternativo nacional más reciente. Escurridizo, políticamente incorrecto y misterioso, son algunos de los apelativos mediáticos que genera el inusual ingenio de este creador arropado de mordacidad certera y una hondura emocional impropia para su edad. Un feliz hallazgo.
BOMBINO / NIGERIA
Bombino es uno de los hijos de esta tradición musical que los medios han sabido proyectar internacionalmente como “estrella tuareg”. Al igual que otros estetas del género como Tinariwen, Omara “Bombino” Moctar representa a un tipo de músicos capaces de navegar entre la tradición más genuina y la irreverencia de la música contemporánea occidental. Originario de una región con gran presencia tuareg (Agadez), Bombino fue en los primeros años de su vida un refugiado, con constantes idas y venidas a Argelia, todo esto en años convulsos de rebelión de este pueblo a causa de su creciente marginalización, aspecto que se ha visto reforzado especialmente en Níger y en Malí. Este exilio permanente fue forzado incluso en el año 2007, época en la que aprendió a tocar el instrumento que ha sido santo y seña del llamado blues del desierto: la guitarra eléctrica, elemento común en toda una serie de artistas míticos de la franja del Sahel.
Iconoclasta y rupturista, el nigeriano ha ido acuñando con el paso del tiempo una personalidad única que ha acabado colocándolo en lo más alto del podio de la world music. Después de su increíble éxito en 2013 con ‘Nomad’ (Nonesuch Records), un álbum producido por Dan Auerbach de The Black Keys, el guitarrista tuareg publicó su tercer álbum el pasado 1 de abril a través del sello Partisan. ‘Azel’ ha sido producido por Dave Longstreth (Dirty Projectors) y mezclado por David Wrench (FKA Twigs, Caribou, Jungle), en los estudios Applehead de Woodstock. A tenor del primer adelanto de su nuevo disco, ‘Akhar Zaman’, todo apunta a que este artista incombustible sigue empeñado en evolucionar más allá del corsé que imprime sus propias raíces.
CORIZONAS / ESPAÑA
Corizonas es la formación resultante de la unión de Los Coronas (iconos del rock instrumental y los sonidos surferos patrios) y los vallisoletanos Arizona Baby (herederos de la escuela clásica de artistas como Love, Dylan o los primeros R.E.M.). La banda prepara el lanzamiento de su nuevo álbum, un trabajo que tienen prevista su edición en marzo de este mismo año. En el background de la formación encontramos dos años maratonianos con giras ininterrumpidas, primero como Dos bandas y un destino y luego ya como Corizonas. Docenas de salas, teatros y festivales atestiguan su ascenso a la primera división de la escena nacional a golpe de folk rock encabritado y polvoriento con querencia por los ambientes western y rockabilly. Una sombra que ha calado hondo tanto en los medio como en el público afín al rock más auténtico. Blogs alternativos y webs indies; programas de radio y telediarios nacionales… Pocos han hecho caso omiso al ascenso de Corizonas.
Innumerables reportajes dan cuenta del fenómeno, salpicado con premios como el Mejor Directo 2011 de Radio3 o la nominación a Mejor Artista Español en los European Music Awards (MTV). Sus demoledores directos y el incontestable impacto de su único álbum hasta la fecha, el imponente The News Today, han bastado para que esta feliz conjunción de acreditados músicos se haya ganado por igual el fervor y respeto de la actual escena nacional. El trece de mayo publican su álbum ‘Nueva realidad vital‘ que tomará cuerpo en Sevilla cuando aterricen en uno de los escenarios de Territorios Sevilla,
CRYSTAL CASTLES / CANADÁ
Surgieron de la nada como un extraño vendaval, acuñando un estilo al que muchas otras bandas coetáneas acabaron por adscribirse: el witch house. Crystal Castles es un archiconocido dúo de electrónica experimental formado en Toronto, Ontario, una rara avis dentro del panorama alternativo criado a base de intrépidas mantras sintéticas y ritmos sincopados por el productor y músico Ethan Kath. Conocidos por sus hilarantes shows, auténticos espectáculos de vanguardia sonora en la misma onda que Die Antwoord, el primer y homónimo disco de Crystal Castles alcanzó el top de los 100 mejores discos de la década según la prestigiosa revista NME. Le siguieron una serie de discos imprescindibles a la hora de entender la evolución de la nueva música de baile (‘II’ y ‘III’) verdaderas obras revolucionarias que llegaron a entusiasmar al mismísimo Robert Smith de The Cure, quien colaboró en su exitoso hit-single ‘Not In Love’.
Cuando la cantante Alice Glass decidió abandonar el proyecto, corrieron los rumores sobre una posible disolución de la banda. El 16 de abril de 2015, Ethan Kath lanzó un nuevo tema como Crystal Castles, ‘Frail’, con una nueva vocalista llamada Edith, una misteriosa intérprete que siguió reafirmando la supervivencia de Crystal Castles en el momento en el que otro corte titulado ‘Deicide’ se filtró en las redes sociales del grupo el pasado verano. Con la sombra de un cuarto álbum en ciernes (se publicará este año con el sello Fiction Records), los canadienses han decidido volver a los escenarios y Territorios Sevilla será testigo de uno de los regresos más esperados de lo que va de año.
PÁJARO / ESPAÑA
La Sevilla de Pájaro es más la del río Betis que la del Guadalquivir, más de Itálica que de Giralda, más de Escipión que de Muza. El remanente romano empatiza con el gusto del artista por la Italia de Adriano Celentano, de Sergio Leone o de Ennio Morricone. Su pasado como guitarrista ineludible de la escena rockera sevillana –hablamos de una época en la que, con toda naturalidad, se podía rendir pleitesía a Elvis y a la Virgen de la Macarena el mismo día y a la misma hora– ha dejado tal poso en su genio, que basta oír temas como Las criaturas o Santa Leone para darnos cuenta de que no puede haber más espontaneidad en cómo se mezclan en el aire las ondas de una frenética guitarra surfera con las de una corneta procesional de Semana Santa sevillana, o unos acordes de jazz a lo Djiango Reinhardt con unos versos de San Juan de la Cruz.
Y es que con Pájaro, Sevilla, Texas, Nápoles, Nueva Orleans, Roma, Almería o Memphis se huelen desde la ventana. Y el rock’n’roll, el blues, el surf, el swing, la saeta, la tarantela o el spaghetti western suenan como una misma cosa cada vez que el maestro pone los dedos en las cuerdas de su guitarra. Así, la magia surge de convertir en posible lo imposible. Tras varios años presentando su magnético debut Santa Leone por todo el país, Andrés Herrera y su banda vuelven al tajo con el esperadísimo He matado al ángel, un disco repleto de entresijos y donde han colaborado artistas tan personales como Guadalupe Plata, All La Glory, Julián Maeso, El Twanguero Guitar o Los Saxos del Averno. Este año Territorios Sevilla acogerá el proyecto con los brazos abiertos.
RACHID TAHA / ARGELIA
El cantante, compositor y activista argelino Rachid Taha se ha convertido en un referente de la voluntad de modernización de la juventud árabe. Para ello ha defendido la evolución de una música que, sin dejar de estar estrechamente conectada a sus raíces, integra otros estilos, ya sean estos pop, rock o tecno. Además, Rachid siempre ha hecho gala de un fuerte componente ideológico, ya desde los días en los que debutó como cantante del grupo Carte de Sejour. Algunos hitos de su extensa carrera son la popularización del estilo chaabi, gracias al gran éxito que obtuvo con su versión de ‘Ya Rayah’, y su participación en el disco ‘1, 2, 3 Soleils’, junto a Khaled y Faudel, en lo que supuso la popularización definitiva del “raï”.
En su excelente nuevo álbum ‘Zoom’ -en el que colaboran Brian Eno y Mick Jones de The Clash- hace gala de una gran diversidad de estilos mezclando tributos a Elvis Presley y Oum Kalsoum con electro-rock, down tempo, efluvios árabes, dub, trip-hop e himnos antifascistas. Su eclecticismo sonoro se acompaña por unas impactantes puestas en escena en las que hermana con naturalidad los sonidos orientales y occidentales. Son verdaderas orgías rítmicas en las que Rachid Taha aprovecha para presentar los temas nuevos y versionar sus clásicos, entre los que nunca falta la relectura de un ‘Rock el Casbah’, clásico punk que se diría que fue escrito para él. Todo esto siempre con la complicidad indispensable de su mano derecha Hakim Hamadouche, cuyo laúd electrificado se convierte en el puntal de su exuberante sonido que este año podremos disfrutar en todo su esplendor.
RAIMUNDO AMADOR / ESPAÑA
“A Jimi Hendrix se lo debo todo”, es su proclama. Guitarrista iconoclasta, revolucionario del “toque” flamenco a través del virtuosismo rockero. Raimundo Amador ha vivido el underground y el éxito más rotundo, asimilando las raíces de la música popular andaluza y experimentando con las fusiones. Se ha codeado con nombres legendarios de los palos más dispares, pero siempre ha sido fiel a su idiosincrasia gitana. Raimundo el de los Amaya, el de Pata Negra, el de Veneno, el que acompañó a B.B. King en su gira española de 2004 o el que sedujo Björk con su guitarra Gerundina. Nacido en Sevilla, Raimundo pasó gran parte de su vida en el barrio de Las 3.000 viviendas, donde se gestó el germen infeccioso del flamenco más puro y emocional. Su padre le enseñó a tocar la guitarra y ya quedan lejos los años en los que el aprendiz recorría las calles de la capital hispalense tocando la guitarra a cambio de un bocadillo y un taxi para volverse a casa. En el tablao de Los Gitanillos conoció a Camarón y Paco de Lucía. Con el primero colaboró posteriormente en la grabación del seminal disco ‘La leyenda del tiempo’. Casi nada.
A mediado de los setenta conoció a Kiko Veneno, pero fue en 1977 cuando junto al de Figueres y a su hermano Rafael formaría parte de los míticos Veneno, banda que acabó influyendo en el devenir de la siguiente generación de músicos andaluces. De King Crimson a Miles Davis, de Johnny Winter a Lole y Manuel, el peculiar microcosmos de Raimundo Amador está plagado de influencias y colaboraciones entre las que destacas sus cameos con Toti Soler, Martirio, Enrique Morente, Malevaje, Radio Futura, Tomatito, Ketama, Los Rodríguez o Juana la del revuelo. El título de su último disco de 2010 lo delata: ‘Medio hombre y medio guitarra’. Porque hablamos del perfecto hermanamiento entre la tradición y la vanguardia, el cruce más salvaje que el blues y el flamenco podrían haber soñado jamás.
RAT BOY / INGLATERRA
Rat Boy es uno de los secretos a voces que brillará en Territorios Sevilla 2016. Aspirante a nueva voz de la juventud británica desencantada, este adolescente de Essex ha logrado acercarse a esa medalla con apenas una mixtape autoeditada de cinco temas (esto exceptuando algún single posterior). Nominado por el NME en su Best New Artist 2016, el chico anda listo para ser colocado junto a Jamie T o Flowered Up. Aunque si buscamos referentes con enjundia histórica, podríamos vincularlo en cuanto a importancia generacional a figuras de la talla de Shaun Ryder (Happy Mondays) o Joe Strummer (The Clash). Aunque bajo este peculiar alias artístico se esconde un niño prodigio llamado Jordan Cardy, alguien capaz de asumir la carga de grabar voces, guitarras, bajos y teclados por sí mismo, aunque en directo recurra a una banda engrasada con la que da rienda suelta a sus hits proto-generacionales.
Si quisiéramos buscarle un novio perfecto a la iconoclasta Lily Allen, Rat Boy se llevaría todas las papeletas, probablemente por su capacidad para mezclar estilos contrapuestos (pop, rap, punk, dance) con el desparpajo de quien probablemente acabará encumbrado como uno de los nuevos iconos de la música popular contemporánea. Pensad por un momento en un joven Robbie Williams fan de The Libertines, las zapas y los emoticonos de WhatsApp liderando a ese esteta de los sonidos urbanos llamado The Streets y casi acertaréis con la propuesta que Rat Boy nos tiene preparada para este año. Por su puesto, ya podéis dejaros atrapar por hitazos como Fake ID o Sing On.
SEX MUSEUM / ESPAÑA
Cuando nos referimos a Sex Museum hablamos de los reyes del garaje rock patrio, últimos regeneradores de la psicodelia hard, la mejor rock band del país. Por supuesto, hablamos de un nombre que invita casi a la mitificación de un estilo que cuesta encajar en la escena nacional: el rock puro y duro, salvaje, intenso y emocional, ese que se experimenta verdaderamente sobre un escenario. Y es que si algo ha caracterizado a la banda madrileña que capitanean los hermanos Pardo, son sus ganas de salir a la carretera y vivir su aventura musical como una auténtica road movie. Adelantándose décadas a la realidad musical actual, ellos nos descubrieron que su funcionamiento dependía más de los conciertos que de los discos vendidos y en ello se volcaron. Y desde hace años no han hecho otra cosa que actuar, en cualquier lugar, desde un garito pequeño hasta un estadio, acumulando cientos de actuaciones eléctricas y acústicas, con su banda o a través de sus aventuras paralelas (Los Coronas, por ejemplo).
Pioneros de la escena de garaje e independiente, fueron endureciendo y radicalizando su música según giraban por Europa a principio de los 90s. Ese aprendizaje dio lugar a su personal estilo que planta sus pies entre el garaje y el hard-rock más psicodélico. Este años los tendremos en Territorios celebrando su 30 aniversario con un repertorio que repasa toda su carrera y un regalo que acaban de poner en circulación: su poderosa versión de Beastie Boys (‘Fight for your Right’) vs Deep Purple (‘Smoke on the water’) en la que han contado con la colaboración de Def Con Dos.
THE HORRORS / UK
Sus inicios arrojaron ríos de sangre y tinta. Aquellas pintazas sacadas de un corto de Tim Burton, aquel sonido violentamente punk heredero del rock garaje de iconoclastas como The Sonics, The Fuzztones o Screamin’ Lord Sutch, la estrepitosa gira presentación de ‘Strange House’… Los británicos The Horrors las tenían todas consigo para acabar convirtiéndose en una banda de cabecera. Y así fue. Tras aterrorizar a la generación MTV con un vídeo facturado por Chris Cunningham (‘Sheena is a Parasite’), la banda que capitanea el cadavérico Faris Badwan consiguió dar un giro al timón de su nave de los muertos con un segundo disco que coronó las listas de lo mejor de 2009: ‘Primary Colors’, que con su portada inspirada en The Cure, ofrecía nuevos puntos de fuga más cercanos al pop y el afterpunk de clásicos como Psychedelic Furs o Echo & The Bunnymen.
Pero la cosa no quedó ahí y su progresión musical no ha dejado de crecer desde entonces con sucesivos trabajos plagados de guiños a la psicodelia de los setenta, el dance made in Madchester y el kraut más embriagador. La muestra está en discos del nivel de ‘Skying’ (otro rompe listas independiente), el álbum de remezclas ‘Higher’ (donde compañeros de generación como Blanck Mass o Connan Mockasin se encargaban de retorcer algunos de sus mejores temas) o el fulgurante ‘Luminous’. Probablemente estemos hablando de la banda más personal y creativa de su generación.
THE WOMBATS / INGLATERRA
El trío de Liverpool The Wombats es uno de los máximos exponentes del nuevo post-punk bailable con ecos ochenteros. Esto significa ritmos endiablados, melodías pegadizas y un espíritu adolescente capaz de hacerte olvidar los pormenores del día a día con apenas un par de acordes. Ya con su primer álbum, el enérgico A Guide To Love, Loss & Desperation, consiguieron apuntarse el tanto de ser definidos por la prensa como la versión 2.0 de los clásicos Madness. A medio camino entre los Blur más luminosos y los Arctic Monkeys menos afilados, la banda nos regaló hace meses un tercer álbum titulado Glitterbug, un disco cargado de estribillos pop rompepistas que acabó convirtiéndose en uno de los trabajos más enérgicos y sugerentes de 2015.
Con ellos cualquier concierto acaba convirtiéndose en una auténtica celebración del hedonismo sonoro, como si The Human League jamás hubieran envejecido. Mezclando lo literario y lo cínico en sus letras y tirando de un humor cáustico y soterrado, los británicos son capaces de generar fieles y divertidos retratos del mundo moderno desde la perspectiva de una nueva generación de músicos que ya no entiende de clichés y que encuentra en Youtube y las redes sociales su ámbito de desarrollo personal. En definitiva podemos hablar de una manera tan particular de enfocar el pop, que cualquiera juraría que canciones como Greek Tragedy, Emoticons, Gime Me a Try o Let´s Dance To Joy Division podrían haber sido piezas firmadas por el mismísimo Ray Davies de The Kinks.
TINDERSTICKS / INGLATERRA
Los de Nottingham son ya unos clásicos contemporáneos, el equivalente a Scott Walker para la generación indie. Empezaron su andadura en 1991, dos años antes de debutar discográficamente con Tindersticks I, álbum en el que ya mostraron muchos de los rasgos distintivos que han marcaron su trayectoria. Con arreglos para sibaritas y la voz de barítono de Stuart Staples, sus canciones se lanzaban por las sendas de Serge Gainsbourg y Lee Hazlewood. Al frente, un «crooner» distinguido para los momentos melancólicos. Dándole cobertura, una ristra de de instrumentos que flotaban o lloraban: violines, carillón, trompeta, vibráfono, órgano hammond. Del excelso pop de cámara de sus primeros tres álbumes (recibidos todos ellos por la crítica con los brazos abiertos) pasaron a arrimarse al soul con Simple Pleasure y Can Our Love…, demostrando a los escépticos que también sabían mantener el listón muy alto cuando aligeraban el equipaje y que su libro de estilo no era tan estático como les achacaban.
Aunque en 2005 surgieron rumores de ruptura coincidiendo con la carrera en solitario de Staples, todo se quedó en un mero espejismo despejado con un espléndido séptimo trabajo, The Hungry Saw. En 2012, con The Something Rain, su noveno álbum (siete bandas sonoras para cine, fondos sonoros para museos e instalaciones de arte y discos en directo al margen), reivindicaron de nuevo su elegancia ineludible. Tres de sus miembros originales (Staples más Neil Fraser y David Boulter) junto al bajista Dan McKinna y el batería Earl Harvin) han grabado ahora el décimo LP de la banda, The Waiting Room, que llega reforzado con un proyecto visual: un cortometraje de cada una de sus canciones, iniciativa que ha sido comisionada por diversos directores de cine. En resumen, unos mitos actuales del pop con mayúsculas que este año sentarán cátedra en Territorios Sevilla.