Tras estos meses de inestabilidad e incertidumbre, el Teatro Central nos vuelve a asombrar con una programación ambiciosa. Que procura dar un mayor espacio a los intérpretes andaluces con relación a temporadas anteriores: como muestra de apoyo y acompañamiento a la inhabitable situación en la que se encuentra al sector de las artes escénicas, que percibe que su supervivencia está en alto riesgo.
Nosotros en Achtung, nos hemos encomendado a hacer una selección en la que nos hemos encomendado a alcanzar un equilibrio, entre cubrir la mayoría de las representaciones programadas de artes del movimiento de las compañías más consagradas a nivel internacional, con la mayoría de las labradas por intérpretes afincados en Andalucía. Intérpretes de extraordinario nivel y bagaje, que valen la pena detenerse sin estar pensado en ese lema, que dice: “hay que apoyar lo local”. Es cierto que lo que nos resulta más cercano merece una cierta dosis de atención y cariño; pero en serio, aquí en Andalucía tenemos profesionales que basta verlos en escena para comprobar que hay mucha creatividad, investigaciones exhaustivas…, en fin, calidad. He allí que les invitamos a comprobarlo.
Por tanto, para lo que corresponde a los meses de octubre, noviembre y diciembre del presente año, les animaremos a que ustedes se fijen en las siguientes piezas, esto es:
Sidi Larbi Cherkaoi/Eastman con “Nomad” (23 y 24 de octubre). La cual “se inscribe en un universo árido y voluble, el de la sed física y emocional; en las dunas de arena moldeadas por el viento. Esta creación sugerente y sus nómadas danzantes, evoca con fervor el aliento del horizonte”.
Cía. Guillermo Weickert con “Parece nada” (24 y 25 de octubre). “En Parece Nada, Guillermo se pregunta: si, como artistas, servirán aún nuestros hechizos, si tendremos aún la capacidad (y la obligación) de desvelar, restaurar y educar la mirada… de dirigirla y dirigirla bien; de elevarla, de no apartarla, de no hacerla bajar por la vergüenza, para volver a sentir de nuevo que tenemos los ojos (por fin) abiertos…”.
Anne Teresa de Keersmaeker/ Pavel Kolesnikov/Rosas con “The Golberg Variations, BWV 988” (27 y 28 de noviembre). “Anne Teresa de Keersmaeker se mantiene fiel al más decisivo de sus principios: basar sus coreografías en el estudio de partituras musicales. Con sus treintena de variaciones de todo tipo, la música de las Goldberg propone un formidable y apasionante desafío: inventar una forma bailada en permanente transformación, gravitando sin embargo alrededor de un foco inmóvil. Una forma para Anne Teresa de volver a transitar por un camino conocido, para leerlo a la luz de nuestros días y reafirmarse en su investigación coreográfica”.
Ricardo Iniesta/Atalaya con “Elektra.25” (11 y 12 de diciembre). Esta es la única pieza que hemos seleccionado que no será danza contemporánea, con la misma “Atalaya quiere recuperar la esencia de aquel montaje, introduciendo importantes cambios y aportaciones que potencien aún más su valor. El número 25 se refiere a los años que han pasado desde que se pusiera en marcha aquel proyecto, a que será el 25º montaje de Atalaya, a los 25 siglos –2.500 años exactos– que se cumplen desde el nacimiento de Eurípides y a los 25 años desde la muerte de Heiner Müller, con cuyo Elektratext comienza este espectáculo”.
Manuela Nogales Danza con “Poéticas en la sombra” (19 de diciembre). “El punto de partida de la pieza que estrena en nuestro teatro es, como la propia creadora declara, el arte del “Kintsugi”, una técnica artesanal centenaria del país nipón que consiste en reconstruir la cerámica rota para hacerla más hermosa de lo que era antes. Esta filosofía se ha convertido en una potente metáfora de la belleza de las cicatrices de la vida, de la importancia de la resistencia y del amor propio frente a las adversidades…”.